Feudo Montoni

Ubicada en el corazón de Sicilia, Feudo Montoni es una isla de viñas, rodeadas de un entorno natural impresionante y apartada del resto de las DOC sicilianas. En 1595 Andrea Bacci, agrónomo y médico del Papa Sisto V, elogió en las páginas de "De Naturali Vinorum Historia", el primer tratado de Enología italiano, la tradición vitivinícola y la calidad del vino producido en estas tierras.

A finales del siglo XIX, la historia de Feudo Montoni se unió a la familia Sireci cuando el abuelo de Fabio, Rosario, compró Feudo Montoni, reconociendo las características particulares de la tierra y su biodiversidad. Descubrió viñas antiguas, como Perricone, Nero d'Avola y Catarratto. Se enamoró especialmente de los vinos de estas uvas, que presentan características de una elegancia inusual. Por eso compró Feudo Montoni, guardián del secreto.

Elio, el padre de Fabio, seleccionó las mejores plantas de la finca mediante la Selección Masal en la década de 1960. Luego plantó nuevos viñedos y modernizó la bodega. Elio transmitió su pasión y respeto por la naturaleza a su hijo Fabio, enseñándole ética de trabajo y el sacrificio necesario para alcanzar una meta. Este trabajo, si se realiza con dedicación y amor, se convierte en un "maravilloso viaje" a lo largo de la vida.

Durante los últimos 30 años, Fabio ha seguido el legado de su abuelo y su padre, combinando técnicas tradicionales con innovaciones extraordinarias, siempre respetando la naturaleza y sus procesos. En el viñedo se repiten desde hace siglos las antiguas operaciones a mano, de la misma forma. En la bodega los vinos se tocan lo menos posible, intentando aprovechar a fuerza de la Naturaleza.

Hoy en día, los vinos de Feudo Montoni son apreciados en toda Italia por su complejidad y finura, llevando a nuevos niveles de prestigio a las variedades autóctonas como el Nero d’Avola, Catarrato y Grillo o sus deliciosos Passitos.