La familia Gratiot ha sido dueña de Château Larcis Ducasse, un Saint Emilion Grand Cru Classé, durante más de un siglo. El viñedo, de suelos de arcilla y piedra caliza, se ubica en una pendiente orientada al sur produce uvas maravillosamente maduras que resultan en vinos complejos y bien estructurados con sabores frescos y minerales. Estas características se atribuyen a los diferentes lechos de roca que se encuentran en la propiedad, desde la piedra caliza de la meseta hasta la arena de feldespato rica en hierro en la base de la pendiente.

Los métodos vitícolas se mantienen lo más naturales posible con bajos rendimientos y variedades de uva elegidas y plantadas según el tipo de suelo.

Las uvas se someten a una maceración suave para evitar la extracción excesiva, y el vino se envejece en barrica durante 18 meses. La mezcla final tiene como objetivo proporcionar un equilibrio entre aroma y taninos para dar un vino de carácter único.
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