Macan

Desde las profundidades de la región de Rioja emerge Macán. Este vino fusiona tradición y modernidad, respetando fielmente el estilo auténtico de esta tierra de renombre.

Busca la armonía mediante la expresión genuina de sus raíces. Su origen le confiere una elegancia única, dejando una marca perdurable con un equilibrio memorable entre sensibilidad y expresividad.

Elaborado exclusivamente con la variedad Tempranillo, Macán pasa por la fermentación alcohólica y la maloláctica en barrica y depósito. Su crianza se realiza en roble francés fino y extrafino, con predominancia de barricas nuevas y una parte en barricas de un solo uso. Permanece en madera durante 15 meses y continúa su evolución en botella hasta su comercialización.

Macán y Macán Clásico representan la visión compartida de Rothschild y Vega Sicilia sobre Rioja. Son vinos de gran refinamiento, donde la armoniosa fusión de aromas y sabores revela la autenticidad de su terruño y la capacidad de la región para producir vinos excepcionales.

Macán se revela de manera más reservada, con una elegancia que se desarrolla con el tiempo, envuelta en taninos aterciopelados. Destaca por su capacidad de envejecimiento y una marcada mineralidad que define su carácter distintivo.
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ficha técnica

España / Rioja
D. O. Ca. Rioja
14°
75cl, 150cl

· Tempranillo 100%
40 años
3.333 cepas/ha
100 ha
manual
Con temperatura controlada en depósitos de madera con levadura autóctona.
Roble americano y francés
16-18°C
Corcho
Tinto


notas de cata

Macán muestra un color rojo profundo con destellos violáceos. En nariz, revela aromas complejos de frutas negras maduras, especias dulces y un toque sutil de vainilla. En boca es elegante y estructurado, con taninos integrados y una textura sedosa. Los sabores de frutas negras se complementan con notas de cedro y tabaco, con una acidez equilibrada y un final largo y persistente. Es un vino que captura la esencia refinada de Rioja, ideal para disfrutar ahora o para guardar y seguir su evolución en botella.

maridaje

Carnes rojas asadas como chuletón de buey o cordero asado, platos de caza como estofado de jabalí, quesos curados como Manchego y chocolate negro con alto contenido de cacao. Estas opciones realzan sus sabores profundos y complejos, asegurando un maridaje armonioso y satisfactorio.