El Château de Carles es una noble residencia de los siglos XV y XVI construida por la familia Carle, una poderosa dinastía señorial de Burdeos. Montaigne y La Boétie solían reunirse allí. En el siglo XVIII, el Château perteneció a la bella marquesa Boufflers, amiga espiritual de Voltaire y Rousseau. Comprado en 1900 por Guillaume Chastenet de Castaing, entonces senador de Gironda, fue heredado por su hijo Jacques Chastanet de Castaing. El resurgimiento del Château fue liderado desde 1982 por la nieta de este último, Constance y su marido, Stéphane Droulers. Con la ambición de llevar el vino a la excelencia, se reestructuró la viña plantando con una densidad de 9.000 a 10.000 plantas / ha. Una bodega construida en 2003, permite poner en práctica el concepto total de gravedad entre la mesa de selección y el embotellado.

El vino, proveniente de la denominación Fronsac, no muy lejos de los apreciados terrenos del Pomerol, es oscuro y atractivo. Dominado por el Merlot, predominante en esta zona de suelos arcillosos y suaves pendientes.
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