La zona de denominación Fronsac es la contigua de Canon-Fronsac. Está situada en la parte inferior de las colinas y sobre una meseta de esta agreste región, al noroeste de Pomerol. Los vinos de esta zona ya eran apreciados por Carlomagno, son carnosos, firmes y corpulentos, con un sabor a especias característico.
Los vinos de Fronsac son espléndidamente afrutados y llenos de carácter, tánicos cuando son jóvenes, de un estilo con un toque rústico o tosco en comparación con el gran brillo del Pomerol, por ejemplo, aunque mejora año tras año debido a la inversión en modernización. Entre los inversores se halla el comerciante más importante de Libourne, Jean-Pierre Moueix, cuya intervención ejerce un efecto notable, en especial sobre las pendientes de piedra caliza a lo largo del río, conocidas como Canon Fronsac.